Para muchos ésto no habrá pasado. En pocos años jurarán haberte visto, aparecerán fotos tuyas, dirán que estás con Elvis y Marilyn y que todo este circo ha sido un montaje para alejarte definitivamente de los juntaletras sensacionalistas que llevan más de una década intentando matarte. Porque has aportado tanto que tu marcha deja un vacío demasiado negro, demasiado frío, demasiado... vacío.
La muerte te ha convertido en pocas horas en mito, donde el "blanqueamiento" de piel y los procesos judiciales quedarán en la retina de todos como las vagas excentricidades de alguien que a los once años estaba predestinado a abanderar una revolución.
Te recordaré por tus calcetines blancos, las 100 millones de copias de Thriller y el Moonwalk. Porque aun acomplejado cantaste por la igualdad y apoyaste más de 30 asociaciones de lucha contra enfermedades mortales, por tus duetos con Paul McCartney, Janet y Stevie Wonder y We are the world. Por los zapatos antigravitatorios, el guante lleno de diamantes, los videoclips y los 50 estadios de fútbol que llenaste en 2 horas. Por una mano en los cojones y la otra apuntando al sol, el gritito perenne en segundo plano de todas tus canciones, los videojuegos de la SEGA y la peli que pasaron en Antena3 hace mil años de los Jackson 5.
Gracias por educar mis oídos. Gracias por Black or White.
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